Somos uno, somos tres

Si estás aquí es que te importa el AMOR, es que te importas tú, es que te importa tu otro yo. Y ahora, tranquilamente, quisiéramos que te plantearas, que os planteaseis en pareja, …

El AMOR auténtico es …

el que mas cerca está de Dios.
Es lo que mas importa para ser feliz.
Es lo que mas duele, porque falla, porque es humano.
Sabes que a veces te es difícil incluso quererte a tí mismo,
por eso tienes al lado a alguien para que te recuerde lo que eres, lo que vales.
La individualidad, el egoísmo, es lo contrario a la pareja, el enemigo del amor.
La conyugalidad, el matrimonio cristiano, es andar a la vez hacia un mismo sitio,
una vocación, una receta de felicidad.

Hay quien dice que al casarnos nadie nos dio un libro de instrucciones. No es verdad. El matrimonio es mucho mas que eso.

El sacramento, sin ser mágico, siembra una semilla en nuestra unión, semilla que hay que regar. Ya sabemos que toda relación humana cuesta porque es imperfecta, pero Dios se introdujo en nuestra conyugalidad para hacerla fuerte, para hacerla santa, ¡qué mejor manual!

El Amor divino baja hacia el corazón de la persona y se cruza verticalmente con el amor humano, el que nos une a los demás horizontalmente. Curioso, en forma de cruz, el mayor símbolo del Amor. Si bien la salvación, la felicidad espiritual, es individual, sólo se consigue queriendo a los demás, a través de los demás. Pues bien, el matrimonio cristiano es la cruceta privilegiada de ese AMOR.

Él nos dijo que lo siguiéramos en grupo, nos enseñó el Padrenuestro en el que fijaos, hablamos a Dios en plural. Nadie es feliz si solo se quiere a sí mismo.

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Los Equipos de Nuestra Señora somos un movimiento internacional de matrimonios cristianos que seguimos una espiritualidad conyugal que fundó el P. Caffarel en París en 1939 y ha servido a miles de personas a lo largo de todos estos años y en los cinco continentes.

Cinco matrimonios acompañados de un sacerdote consiliario, como uno más, se reúnen una vez al mes para compartir la Fe, buscar juntos a Dios y vivir su conyugalidad, trabajando en el cuidado de su matrimonio, sabedores de que solos es muy difícil.

Lo que os proponemos con esta iniciativa queda perfectamente recogido en palabras del Papa referidas a los Equipos: “Lo que vivís en pareja y en familia –acompañado por el carisma de este movimiento-, es lo que tenéis que testimoniar, anunciar, comunicar hacia afuera para que otros se vean, a su vez, puestos en camino”.

Si queréis más información no dudéis en contactar, os atenderá un matrimonio como vosotros, y recordad siempre, que tenéis a Dios dentro de vuestro matrimonio porque,

Somos uno, somos tres y si queréis, contáis con nosotros.

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